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Morenita de Suyapa (Letra)

 

Virgen de Suyapa de Cerca




Virgencita de Suyapa

tan chiquita y milagrosa

eres enviada de Dios,

fuiste hallada en un camino

en las horas de la noche

por un hombre labrador;

madre eres de nuestra patria

y nos das tu bendición,

en nombre de los obreros

y también de labradores

te dedico mi canción.



Desde los cerros de plata

se divisa un pueblito

como manto en un palmar

y por los rayos del sol

se ilumine tu iglesita

que parece de cristal;

si nosotros los hondureños

salimos de nuestra nación,

llevamos tu nombre grabado

muy dentro del corazón.



Por los cerros y montañas

se oye un canto de alabado,

un murmullo sin cesar

son tus hijos peregrinos

que de tierras muy lejanas

te vienen a adorar;

Virgencita de Suyapa

te pedimos de corazón

que ruegues por nuestros

hogares y también por la nación.





José Reyes Carranza

Augusto C. Coello (Biografía)

 

Augusto C. Coello Biografía




Augusto Constantino Coello Estévez, nace en Tegucigalpa el 1 de septiembre de 1882, hijo de Adela Estévez y del Abogado Adán Coello y hermano del poeta y periodista Adán Coello Estévez, realizó sus estudios de Bachillerato en Ciencias y Letras en un colegio católico dirigido por El Padre Ernesto Fiallos, posteriormente estudió Derecho en La Universidad Central de Honduras, actualmente La Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH). El 25 de diciembre de 1911 contrae matrimonio con Joselina Castillo con quien procreó seis hijos: Augusto, Rafael Alberto, Antonio José, Jorge Antonio, Joselina y María de Los Ángeles.



Su amor por las artes específicamente por la literatura y la poesía le proyectaron desde muy joven como un apasionado escritor y poeta, lo que también contribuyó a iniciar su carrera como periodista, de igual manera incursionó como político y diplomático con una carrera muy fructífera. Como periodista dirigió muchos diarios entre ellos: “La República”, “La Prensa Libre”, “El Pabellón Rojo y Blanco”, “El Diario”, en Costa Rica y “En Marcha”, “El Imparcial”, “La Regeneración” y “Pro Patria” en Honduras.

Augusto C. Coello represento a nuestro país como diplomático y consultor en distintas oportunidades así mismo desempeño innumerables cargos entre los cargos más importantes que desempeñó como político y diplomático podemos mencionar:

Diputado al Congreso Nacional (1904)

Miembro de La Delegación Consular Hondureña en Washington

Jefe de La Delegación de “La Cuyamel”

Alcalde Interino de La Ceiba (1915)

Vocal Primero de La Junta Directiva de La Sociedad de Geografía e Historia de Honduras (1925)

Diputado de la Asamblea Nacional Constituyente por El Departamento de La Paz, (01/06/1904)

Subsecretario de Relaciones Exteriores

Secretario Privado del Presidente de La República

Secretario de La Comandancia General del Ejército

Comandante del Puerto de Omoa

Gobernador Político del Departamento de Intibucá

Miembro Consultor de La Comisión Técnica que delimitó la línea fronteriza entre Honduras y Guatemala

Como poeta sus obras son muchísimas, pero sin dudas las más memorables son: “Canto a La Bandera”, “Digesto Constitucional de Honduras”, “Himno a Los Héroes del 56”, “Las Islas del Cisne” (En co-autoría con Romulo E. Durón), “La Triunfal Primavera”, “Como El Agua”, pero definitivamente las más reconocidas son El Himno a La Madre, y la Letra de nuestro Himno Nacional, obra que a los 17 años ya tenía casi terminada y que hoy por hoy y pese a las críticas es toda una joya poética que nos hace sentir orgullos de ser hondureños y que nos eriza la piel en cualquier parte del mundo donde le escuchemos.



Augusto Coello falleció en San Salvador el 8 de septiembre de 1941, sus restos fueron trasladados a su natal Tegucigalpa, y descansan en El Cementerio General de La Ciudad.

Pitero (Letra)

 

Traje típico

Tan limpio que andaba

Que ayer me mudé,

Buscando a pitero

Todo me enlodé.

 

Cójalo, cójalo

Allí se metió

Que no se me vaya

Ese hermoso pitero.

 

Se metió en el monte

Lo busco con luz

Y sale pitero

Diciendo ¡ay Jesús!

 

Pitero está gordo

Pa-alivio de males

Y salen diez pesos

De nacatamales.

 

Uchú, campirana

Uchú, fantasía

Atráquenlo duro de la

Rabadilla (bis).

 

Al indio le gusta

El maíz doradito,

Pero más le gusta

El pitero bien frito,

 

Al indio le gusta

El maíz amarillo

Pero más le gusta

El pitero tordillo

 

Pa-alivio de males,

Señores les lío,

Quien quiere comerse

Un tamal de pitero.

 

Tamal de pitero

No lo como yo

Porque mi abuelita

De eso se murió.