Desde hace algunos años Tegucigalpa está convertida en un caos,
pero a eso ahora también debemos sumarle que se está convirtiendo en un
infierno, no solo por los altos niveles de violencia y criminalidad, sino
también por las altas temperaturas a las que nos vemos expuestos, gracias al
señor alcalde Nasry Asfura, para
quien su prioridad parece ser cortar árboles y construir pasos a desnivel,
convirtiendo poco a poco a la capital de Honduras en una Ciudad de Cemento.
Será que nadie le ha explicado a
este señor que los humanos necesitamos si o si de las plantas para respirar
oxígeno (no cemento), quizá donde el estudio no le enseñaron semejante lección,
pero ojo que no solo es exterminador de árboles, él y el alcalde anterior han compartido la tarea de eliminar todos o
casi todos los puentes peatonales (creo que todavía hay dos que tres). Seguido de
los puentes van los semáforos, ambas herramientas han sido sustituidas por
rotondas, pasos cebra y túneles peatonales (o túnel, si no me equivoco sólo hay
uno en Plaza).
Nuestras calles son angostas, las
dichosas rotondas provocan más tráfico del que había antes, los pasos cebra
(donde hay) prácticamente nadie los respeta, si usted va de peatón tiene que
rogarle a Dios a que un conductor se compadezca y ceda el paso; y siempre
rogando que el del otro carril no le eche el carro encima. El túnel pues no
está tan mal si quitamos el hecho que en lugar de cruzar en línea recta como se
hacía con los puentes ahora se camina el doble de distancia en un tramo de
caracol. En este túnel a veces hay “seguridad”, y se diseñaron una serie de
cubículos para vendedores, de hecho el mes anterior realizaron trabajos para
dividir en dos cada cubículo y hasta el sol de hoy desde que se inauguró el
túnel no hay nadie vendiendo (que desperdicio cierto), bueno a este túnel le
daré medio punto a favor salvo que un día se derrumben por mala construcción,
sin ánimo de parecer pesimista, pero si se hunden los centros comerciales imagínense
las obras públicas.
Auxiliar de Tránsito |
Por poco me olvido de los
activistas de amarillo, esos que parecen pollos (sí, ni crean que los voy a
nombrar como los simpáticos personajes amarillos de Pixar, jamás, ellos si son lindos) según se sabe su trabajo es
colaborar con el tráfico y ayudar a los peatones a cruzar la calle, bueno ya
han atropellado a más de uno, es que no inspira respeto La Policía, ahora imagínense los de amarillo, no me dejaran mentir
si les digo que muchas veces estos individuos dejan de hacer su trabajo por
estar con su bendito celular, sin olvidar lo mal que tratan a la gente como si
les estorbara, claro no les gusta su trabajo pero no es culpa del peatón o sí?.
Tampoco me dejaran mentir si les
digo que las benditas obras del alcalde capitalino son un desastre no solo de
viabilidad sino de infraestructura, pues más de una vez sus túneles vehiculares
se han inundado con una pequeña lluvia, desgraciadamente la población
capitalina tiene no solo problemas de memoria sino de falta de dignidad, porque
siguen votando por alcaldes de un partido que solo desgracias le ha dejado a
este país y que está convirtiendo la capirucha en una Ciudad de Cemento, sin árboles, sin agua, sin puentes y sin nada,
pensemos mejor antes de ir a votar por alguien que no le aporta beneficios a
nuestra ciudad, ahh y no se olviden del Trans
de Ricky donde Álvarez y Asfura están íntimamente ligados, que dolor de
cabeza, tocará seguir aguantando estas infernales temperaturas gracias al Señor del Cemento.
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